Una vez conseguido el documento “DEFINITIVO” por parte de este colectivo, se comprueba con “estupor” que las Ordenanzas han sufrido cambio sustanciales que peligran el proceso de regularización tal como se quiere plantear y que supone un cambio brutal conforme la aprobación inicial del 2016, en dos grandes aspectos:

-Se ha suprimido el artículo 10.1.3 que contempla la “Reinversión” de los recursos derivados del 10% del Aprovechamiento Medio a las obras de urbanización de las ARG. El artículo 10.1.3 que lo contemplaba, siendo compatible con el artículo 75.2 de la LOUA y que suponía el compromiso de “todas las formaciones políticas” con el extrarradio, acordado en Pleno del Ayuntamiento. Tras años abonando un IBI urbano y recibiendo un trato discriminatorio con respecto al resto de ciudadanos de Chiclana, veíamos por fin que el compromiso adoptado y firmado en el protocolo de intenciones, era una realidad.

La supresión de este articulado, supone un incremento del 20 % de los costes para regularizar, faltando a la verdad en los simuladores oficiales de la página web de Urbanismo (actualmente suprimido).

-Por otro lado, se incluye el artículo 54 en el que exige que para poder contratar agua potable, se deben de cegar los pozos actuales de abastecimiento. Parcelas “condenadas” a las dimensiones de 1000, 1500, 2000 o 2500 metros cuadrados, sólo podrán REGAR con agua potable, siendo esto demencial y siendo un “chantaje” que no se puede permitir.

Estas consideraciones deben de ser aclaradas por un Urbanismo que una vez más consigue a pulso ningunear a los vecinos.

Por parte de este colectivo, se activará los mecanismos necesarios para difundir al máximo este atropello a los derechos de los vecinos, y estudiará que medidas pueden tomarse acudiendo a todos los estamentos que fuesen necesarios.

La confianza se gana en mucho tiempo y constancia mientras que la desconfianza en solo un instante.

Chiclana de la Frontera, 5 de Agosto de 2018